Sueño

Dormir bien es fundamental para la salud física y mental, así como para poder disfrutar de una buena calidad de vida.

De ahí que sea tan importante dormir las horas necesarias y conseguir un descanso de calidad.

¿QUÉ ES EL SUEÑO?

El sueño es un proceso fisiológico esencial para la salud de las personas. De hecho, se trata del mecanismo natural que tiene nuestro cuerpo para poder recuperarse física y mentalmente y seguir funcionando en pleno rendimiento.

Se entiende como un sueño de calidad y reparador aquel que cumple con las horas necesarias según la edad, transcurre sin despertares y permite levantarse descansado.

FASES DEL SUEÑO

Mientras dormimos, pasamos por diferentes fases del sueño.

SUEÑO NO REM

Fase I

Es la fase de transición entre la vigilia y el sueño. Es decir, la fase en la que nos quedamos dormidos. Se trata de un sueño ligero y, por tanto, del que es fácil despertar. Dura poco tiempo.

Fase II

Todavía es una fase de sueño superficial. Sin embargo, el tono muscular es cada vez más reducido y se enlentece el ritmo respiratorio y cardíaco. Los movimientos oculares desaparecen.

Fase III

Se trata de una fase de sueño profundo, donde empieza el descanso. Por ello, los despertares en esta fase producen una sensación de confusión y aturdimiento. Es también el momento en el que generalmente tienen lugar trastornos como el sonambulismo, los terrores nocturnos o los episodios de incontinencia.

Fase IV

Es la fase de sueño más profundo, cuando realmente descansamos física y mentalmente.

Seripnol actúa en todas las fases que favorecen un descanso fisiológico y reparador

SUEÑO REM

La fase REM aparece aproximadamente al cabo de 90 minutos de quedarnos dormidos.

La actividad cerebral en esta fase es similar a la que se presenta en vigilia. De ahí que sea la etapa en la que aparecen los sueños.

Sin embargo, el tono muscular no existe para evitar una respuesta de movimientos a dichos sueños que pudiera causarnos daños.

Otra característica de esta fase REM es la aparición de movimientos oculares rápidos. Esta particularidad es la que le da su nombre, por sus siglas en inglés: Rapid Eye Movement.

Una vez superada la fase REM, de unos 20 minutos de duración, se completa un ciclo de sueño. Posteriormente, se produce un micro-despertar del que no nos acordamos y nos volvemos a dormir.

Por tanto, el sueño nocturno de los adultos se suele organizar en 5 o 6 ciclos.

La calidad y la duración del sueño dependerá de su eficacia y la correcta distribución del tiempo de descanso a través de las diferentes fases.

FUNCIÓN DEL SUEÑO

La principal función del sueño es recuperar el organismo del desgaste diurno y permitir que pueda funcionar en pleno rendimiento.

Concretamente, las fases de sueño no REM parecen tener una relación directa con la recuperación física y de energía.

Por este motivo, se asocia la falta de sueño profundo con un mayor riesgo de sufrir diferentes enfermedades.

Por su parte, la fase de sueño REM parece jugar un papel clave en la consolidación y el recuerdo de lo que aprendemos durante el día.

¿CUÁNTAS HORAS HAY QUE DORMIR?

El número de horas de sueño necesarias varía de unas personas a otras.

Aunque la media diaria es de 7 horas y media, las necesidades pueden oscilar entre las 4 horas (poco dormidores) y 10 horas (grandes dormidores).Todos estos valores se consideran dentro de la normalidad.

Además, cuántas horas hay que dormir también varía a lo largo de la vida, fundamentalmente en relación con la edad.

Escolares
(6-13 años)

9-11 horas

El sueño se caracteriza por un inicio y despertar temprano.

Adolescentes
(14-17 años)

8-10 horas

La hora de ir a dormir se va retrasando, al igual que el despertar.

Adultos
(18-64 años)

7-9 horas

Mayores de
65 años

7-8 horas

Son frecuentes los problemas para conciliar el sueño, los despertares durante la noche y levantarse demasiado pronto por la mañana.

CONSEJOS PARA DORMIR MEJOR POR LA NOCHE

Unas pautas adecuadas pueden ayudarte a dormir mejor y descansar. Además, a menudo es posible combatir el insomnio de forma natural con tan solo un cambio de hábitos.